AL BAR LA AMISTAD DE ALDEARRUBIA:
Es este un bar de primera,
los personajes que desfilan por él son gente de bandera.
Estar en el Bar La Amistad resulta como una quimera.
Al frente se encuentran Quique y Carmina,
dos seres incomprendidos, sobre todo,
entre los pueblerinos poco instruidos.
Poseen una gran inteligencia,
en este mundo de tan vil competencia.
Han viajado en España por los cuatro puntos cardinales,
y parecen tener muy claros sus ideales.
Enumeremos los protagonistas que, a lo largo de los años,
han sido sus más destacados artistas:
1. Juanito “El Canuto”. Alias “El Rubalcaba”.
Era gran aficionado a los jugadores de pelota vasca,
y con él flipaba toda la basca.
Se iba con “El Veneno” de putas,
descubriendo nuevas rutas.
Estaba enfermo de diabetes,
no podía ni con los filetes.
Ahora está en un asilo,
y nos tiene a todos en vilo.
2. Salustio “Salus”. Alias “El Pistolas”.
Caminaba por el pueblo como un auténtico vaquero,
y no había quién le parara los pies a este rudo pistolero.
Pedía dinero para tabaco y café,
y si no se lo dabas podía actuar con mala fe.
Era capaz de ir de Aldearrubia a Salamanca andando,
y con el “Cara al Sol” franquista entonando.
Ahora está en un psiquiátrico,
Pues tiene un trauma cráneo-encefálico.
3. Bruno Junior, hijo de Bruno Senior.
Como a su padre, le encanta el vino,
tanto el moscatel como el fino.
Tiene reservado en el bar un rincón,
que utiliza como su centro de operación.
Le da al licor que es un primor.
Mira al vaso y luego le da un repaso.
La barra de madera es su más fiel compañera.
4. Manolo “El Lucas”. Alias “El Hocicos”.
Él es un reputado carpintero,
y sabe ganarse el dinero,
tanto en enero como en febrero.
Lo suyo es la madera, y lo confirma,
y de qué manera.
Aunque te arregle o fabrique un mueble atrasado,
te sorprenderás de su fino acabado.
5. José Mari. Alias “El Rosendo”.
Fue adjudicado este mote un día que iba en el tractor con sus crines al viento,
y la verdad es que resultó gracioso y exitoso el invento.
Tenía una gran similitud,
El apelativo fue de acertada virtud.
Su parecido con el artista es,
a fe mía, realista.
Nos recogió a Álvaro y a mí cuando estábamos andando,
y nos puso en Aldearrubia con su coche trotando.
Le gusta Camarón,
nada que ver con los grupos de rock duro y respondón.
6. Julián. Alias “July” o “El Pedrolo”.
Es caso aparte el de Julián,
Pero no estamos hablando de un mazagrán. (Coto dixit)
Un buen día tiró calle abajo un pedroso,
Y nos retiramos, pues el buenazo de él pensó que cada uno éramos un bolo.
Su inusitada fuerza es alabada con grandeza.
¡Menudo tiarrón, es todo un fortachón!
Trabaja cortando trigo con la cosechadora,
¡A ver quién le para los pies ahora!
Se comió dos cajas enteras de Danone,
¡A ver quién se pone!
Los personajes de Historia y Televisión,
le resultan extraños para su visión.
7. Sergio. Alias “El Tormento”.
Es este el antiguo dueño del bar mencionado,
resulta ser un personaje, en verdad, ilustrado.
Su voz está tomada,
Por años y años de furia tabaquera desenfrenada.
Es él, “El Tormento”, como un tipo salido de un cuento.
Va transitando por Salamanca con su camión,
Y asusta a los demás conductores con su vozarrón,
En proceso de extinción.
A todos nos llama Tormento,
y a todos nos impacta con su paso lento.
¡No hay duda!, ¡Hay que hacerle un monumento!
8. Ramón. Alias “El Pelotas”.
Este sí que es un personaje de otra dimensión,
Pues parece de ficción.
A los cuarenta años sigue tomándose sus pelotazos,
Cómo quién de fenomenales guantazos.
Es esta su afición,
y no hay quién le pare cuando está con el músculo en función.
Tiene una ulcera como un camión,
pero persevera bebiendo tequila y ron.
También era futbolista,
y ahora un avezado analista.
9. Bonifacio. Alias “El Bony” o “Pascasio”.
Su entrada en el bar se produce desde la ventana,
y a todos nos asombra su desgana.
“Bonifacio, tócamela despacio”, le dicen.
Hace unos años amenazó con echarnos las bicis a la laguna,
Y no dejar viva ni una.
Sucedió mientras jugábamos a la pelota,
y nos reíamos de él como si fuera un idiota.
El otro día descargó un golpe seco y profundo en la barra,
y yo exclamé desde el baño: ¡Dios, menudo daño!
Salí, y estaba el tipo tan fresco y ya repuesto.
10. Los perros y los gatos.
Son en el bar, unos protagonistas de profundo calado,
tanto por su significante como por su significado.
Los gatos, traviesos, aparecen por la ventana como posesos.
Los perros, juguetones, entran por la puerta dando lametones.
Sale el futbolista con la basura,
y todos detrás de él con calculada mesura.
“La verdad sobre perros y gatos” la debían de haber rodado en este bar,
con el susodicho elenco de estos protagonistas sin par.
11.Quique. Alias “El Futbolista”.
Bebe y bebe cerveza,
y no para de comentar una y otra rareza.
Come mucha aceituna y no deja ni una.
Mira con cara de beodo a la televisión,
Y nosotros soltamos una carcajada con pasión.
Nos cuenta sus historietas de juventud,
y le escuchamos con gran atención y sin acritud.
Sigue en la televisión cada partido,
y con una buena jugada pega un silbido.
¡Qué no!
12.Carmina. Alias “La Mosquitera”.
Con su cara de mujer filipina,
pega gritos y no deja escapar una propina.
Es la reina de la fiesta,
es su cabeza la mejor puesta.
Le gustan las películas de corte neorrealista,
a la muy lista.
Pero cuando se preocupa de la mosquitera,
se pone mala de la regadera.
Y si es cuestión de rajar,
no hay quién la pueda parar,
ni le puedes el freno de mano echar.
Conclusión:
Esta es la divertida taberna a la que muchos llaman caverna.
Aquí transcurre nuestra existencia,
Asentándose los pilares de la ciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario