EL ESCRITOR COMPULSIVO

EL ESCRITOR COMPULSIVO
El gran Gustavo Adolfo Bécquer

EL ESCRITOR COMPULSIVO

El escritor compulsivo soy yo, Alberto Bellido y este es un blog dedicado a mi mayor afición, a mi mayor pasión: El cine, el séptimo arte.

En el blog los visitantes podrán leer y comentar diversos artículos así como guiones de todos los géneros redactados por mí y sus memorias de realización, es decir, las diferentes intenciones que me guiaron en el momento de crear cada historia.

Espero que todos disfrutéis con mi blog.

Un afectuoso saludo.

domingo, 8 de mayo de 2011

MEMORIA DE REALIZACIÓN DE LA HISTORIA DE "ROBERT, UN POLICÍA DE LA GRAN MANZANA".

Este relato, ambientado en la famosa "Gran Manzana", en Nueva York, es 100% propio de la novela y el cine calificados negros. Mi pretensión sería poder rodarla en blanco y negro.
Es la historia de Robert, un policía veterano, viudo, que debido a un imperdonable error, confundió a inocente con un implacable asesino en serie. Entonces, fue desposeído, suspendido de su empleo y de su sueldo. Un año más tarde, su jefe le llama, pues en su comisaría se prepara una importante redada contra una banda de mafiosos italianos que han desembarcado en Estados Unidos. El jefe necesita a Robert para detener a una banda de narcotraficantes hispanos que han secuestrado y mantienen como rehenes a una familia en el peligroso barrio del Bronx, pues no puede recurrir a nadie más para esa misión. Acompañando a Robert está Allison, su antigua compañera de patrulla. Ella es una mujer que ha tenido varios amantes pero, por contra, nunca ha tenido suerte en el amor. Cuando llegan al lugar al edificio del Bronx donde los narcotraficantes han retenido a la familia, observan desde el pasillo cómo se abre la última puerta del piso, la que está más al fondo, y uno de los hispanos, enfadado porque la policía no ha accedido a sus exigencias, empuja contra la pared a uno de los rehenes para acto seguido dispararle. Luego, los narcos disparan a los restantes familiares, liquidándolos. Allison, desesperada y rabiosa por como se han precipitado los acontecimientos, corre por el pasillo hasta alcanzar la última puerta y empieza a disparar contra los narcos abatiéndolos. Sin  embargo, ella también cae malherida por el intercambio de disparos y Robert, desconsolado, corre hacia el sitio del pasillo en el que ha quedado tendida. Allison, postreramente, confiesa que siempre ha estado enamorada de él y Robert le responde que igualmente siempre la ha querido pero que, por respeto a su esposa, no se atrevió a declararse. Allison expira y Robert, enajenado, comprendiendo que jamás va a poder conocer a mejor mujer en la vida que Allison, se pone la pistola en la sien y se descerraja un tiro.
En resumen, como han podido leer en esta memoria, queridos lectores, esta es una historia no negra, sino negrísima y muy fiel a las características revestidas por la novela y el cine negro, que tuvieron como época de esplendor las décadas de los años treinta y cuarenta.

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