EL ESCRITOR COMPULSIVO

EL ESCRITOR COMPULSIVO
El gran Gustavo Adolfo Bécquer

EL ESCRITOR COMPULSIVO

El escritor compulsivo soy yo, Alberto Bellido y este es un blog dedicado a mi mayor afición, a mi mayor pasión: El cine, el séptimo arte.

En el blog los visitantes podrán leer y comentar diversos artículos así como guiones de todos los géneros redactados por mí y sus memorias de realización, es decir, las diferentes intenciones que me guiaron en el momento de crear cada historia.

Espero que todos disfrutéis con mi blog.

Un afectuoso saludo.

miércoles, 12 de octubre de 2011

GUIÓN DE "LA CALABAZA ANDANTE"

SECUENCIA 1. CASA DE PUEBLO. HABITACIÓN. INTERIOR. NOCHE.

Fundido en Negro de Apertura.

Texto sobre Negro: “La calabaza andante”.

Texto sobre Negro: “Noche de Todos los Santos/Halloween”.

Es medianoche en un pueblo de Castilla. ALBERTO, un niño de ocho años, es incapaz de conciliar el sueño. De repente, la puerta de la habitación chirría y se mueve casi imperceptiblemente.

Fundido en Negro de Cierre.

SECUENCIA 2. SALIDA DEL CEMENTERIO DEL PUEBLO. EXTERIOR. DÍA.

Fundido en Negro de Apertura.

Texto sobre Negro: “Aquella misma tarde...”

La acción se traslada, por un momento, al cementerio de la Localidad, donde durante unas horas antes, aquella misma tarde, ALBERTO ha ido con sus PADRES para visitar a los FAMILIARES DIFUNTOS. A la salida del camposanto, varios NIÑOS de la edad de ALBERTO, con calabazas en sus cabezas, rodean a éste, riéndose de él, asustándole, provocándole.

NIÑOS

(Al unísono)
     ¡Jajaja! ¡Jajaja!

Los PADRES de ALBERTO están hablando con otro MATRIMONIO, pero el PADRE, al observar la expectación creada alrededor de ALBERTO, se acerca.

PADRE DE ALBERTO

Oye, Alberto, ¿Por qué no les dices que te dejen una calabaza?

Pero ALBERTO es tímido, está cohibido y asustado y es incapaz de responder. Entonces, ante la sorpresa de sus PADRES, del otro MATRIMONIO y de los NIÑOS, sale corriendo en dirección a su casa.

Fundido en Negro de Cierre.

SECUENCIA 3. CASA DEL PUEBLO. HABITACIÓN. INTERIOR. NOCHE.

Fundido en Negro de Apertura.

Texto sobre Negro: “Medianoche...”

De vuelta a la casa, a la habitación de ALBERTO esa noche, éste observa como la puerta sigue abriéndose, hasta que puede ver con nitidez el pasillo. Comienza a temblar de forma compulsiva, como si estuviera sufriendo un ataque epiléptico. Se toca la frente y se da cuenta que un sudor frío se ha apoderado de él, como si estuviera enfermo. Aterrorizado, ALBERTO grita.

ALBERTO

     ¡Mamá, papá! ¿Sois vosotros? ¿Hay alguien ahí?

Pero nadie le responde, pues sus PADRES están de visita en casa de los VECINOS. En ese instante, el reloj de la Iglesia del pueblo da las doce campanadas y ALBERTO, con el corazón en un puño, vuelve a sobresaltarse. Por fin, aunque tembloroso, decide armarse de valor: Enciende la lámpara de su mesilla de noche, coge un cortaúñas, se levanta y se pone las zapatillas de andar por casa.

Corte.

SECUENCIA 4. CASA DE PUEBLO. PASILLO. INTERIOR. NOCHE.

ALBERTO sale de su habitación y transita atemorizado por el pasillo. De repente, el corazón le da un vuelco al observar, con nitidez, desde la puerta principal que está abierta, a un INTRUSO con una calabaza puesta en la cabeza. Éste, contempla a ALBERTO por un instante y luego desaparece. Por su parte, ALBERTO tiene una transformación, una conversión radical y se envalentona.

ALBERTO

     ¡No corras, cobarde! ¡No te tengo miedo!

ALBERTO comienza a correr por el pasillo hasta salir de la casa.

Corte.

SECUENCIA 5. CASA DE PUEBLO. CORRAL. EXTERIOR. NOCHE.

Ahora ALBERTO está en el corral. Mira a uno y otro lado, pero no hay ni rastro de la calabaza. Una risotada desafiante surge de la panera y ALBERTO se dirige hacia esa dependencia de la casa, reanudando la persecución.

INTRUSO

     ¡Jajaja! ¡A que no me pillas!

Corte.

SECUENCIA 6. CASA DE PUEBLO. PANERA/GARAJE. INTERIOR. NOCHE.

Pero, una vez más, en la panera tampoco hay nadie. Y, de nuevo, las risas del INTRUSO rompen la quietud nocturna.

INTRUSO

     ¡Jajaja! ¡Ven a por mí si puedes!

Esta vez se había ocultado en el garaje, dependencia más próxima y que conecta con la panera. ALBERTO vuelve a correr. La puerta del garaje está abierta.

Corte.

SECUENCIA 7. CASA DE PUEBLO. TIERRA. EXTERIOR. NOCHE.

ALBERTO sale al exterior y, nada más alzar la mirada hacia el horizonte y, gracias a la luz de la luna llena, vislumbra al INTRUSO con la calabaza puesta, corriendo por el sendero que parte en dos a la tierra anexa a la casa. ALBERTO reemprende la persecución hasta llegar a un pozo que suministra riego a un huerto y avanza hasta un nogal cercano. Se para y al instante nota que su respiración está desbocada. En ese momento, un coro de risas vuelve a asustarle.

NIÑOS

(Al unísono)
     ¡Jajaja! ¡Jajaja!

ALBERTO, espantado, sujeta con fuerza el cortaúñas y gira varias veces sobre sí mismo, pero no ve a nadie. Está aturdido, mareado, confuso y se mea en el pijama por el miedo que está sintiendo. Entonces, los NIÑOS, con las calabazas puestas, surgen de la oscuridad.

NIÑOS

(Al unísono)
     ¡¡Vamos, vamos!! ¡¡A por él!! ¡¡A por él!!

Se abalanzan sobre él y, como si se tratara de zombis, lo devoran.

ALBERTO

(Desgarrado)
     ¡¡No, no!! ¡¡Por favor, no!!

Pero sus gritos, a medida que lo van devorando, se convierten en susurros apenas audibles.

Fundido en Negro Encadenado.

Y su cuerpo, ya sin los NIÑOS encima de él, yace ensangrentado sobre la tierra.

Fundido en Negro de Cierre.

Créditos Finales.



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